Tuve la bendición de compartir dos días y medio con el Grupo Scout Pablo VI de mi comunidad parroquial. Fueron unos 35 chicos de diversas edades y una docena de dirigentes de colaboradores. Estuvimos acampando en el predio camping de la capilla de Lourdes, en Sierra de la Ventana.
La pasamos de maravilla, aunque en las dos noche que estuve fuimos preventivamente evacuados por razones climáticas. Pude compartir junto a ellos experiencias, juegos, oraciones y momentos fraternos. El más intenso para mí, en esta ocasión, fue que me aceptaran como parte de su familia y como signo, en una ceremonia en Villa Ventana, me impusieron el pañuelo distintivo del grupo.
Ayer viernes por la tarde, vinieron Vilma y Eduardo de Bahía Blanca a buscarme para trasladarnos a esa ciudad, en donde me esperaban para una tarde de predicación y misa carismática.
Estos hermanos bahienses son especialmente afectuosos y generosos conmigo. Los quiero mucho y los tengo muy presentes en mis oraciones (rezo por Bahia los días 11 de cada mes desde hace cuatro años). El servicio de la ministración duró algo más de cuatro horas !!!! El Espíritu Santo se movió con poder y ocurrieron cosas importantes.
Los hermanos de Bahia luego prepararon una cena para compartir junto a los servidores. Pasó tan rápido el tiempo que debí salir corriendo para no perder el micro.
Les debo, por el momento, las fotos
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