El comienzo de la predicación de nuestro Señor Jesucristo está marcada por palabras de sabiduría muy específicas con el propósito de declarar un tiempo nuevo:
"El tiempo se ha cumplido", es decir, comienza un tiempo nuevo porque con su presencia en medio de nosotros "el Reino de Dios está cerca".
"Conviértanse y crean", es decir, este tiempo nuevo exige un cambio de mentalidad que se logra por la fe, no por esfuerzos humanos.
Inmediatamente, después de este urgente anuncio, Jesús forma su Comunidad. Porque en tiempos de urgente necesidad no conviene estar solos, no podemos desarrollar nuestra fe solos, no tendremos fuerzas ni sabiduría suficiente si quedamos solos. He aqui la importancia de LA GRACIA DE CONGREGARSE en la Iglesia.
Esta Iglesia que, en tiempos de una nueva evangelización, necesitará aprender el lenguaje de la "pesca" para salir al encuentro de quienes tantos necesitan de la Buena Noticia.
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